Por azar, encontré hace bastante tiempo un disco titulado Ronroco.
No sabía nada sobre el músico Gustavo Santaolalla. La cubierta del CD mostraba una escena callejera de noche con faroles, que me atrajo por razones desconocidas.
De golpe su disco se convirtió en favorito mío.
Luego reconocería la música encantadora de Santaolalla en las películas --- por ejemplo, en Babel.
Bueno, el mes pasado, buscando regalos para los demás, vi un regalito perfecto para mí --- el disco Café de los maestros, que destaca en su portada el nombre de Santaolalla.
¡Qué música maravillosa! Santaolalla ha conseguido reunir a los verdaderos maestros del tango.
Supongo que son además maestros del lunfardo pues me parecen extrañas muchas palabras.
Aquí esta una estrofa de una canción de Aníbal Arias --
Vieja viola,
garufera y vibradora,
de mis tiempos
de parranda y copetín,
de las tantas
serenatas a la Lora,
que es la dueña
de mi cuore
y patrona del bulín.